RECETAS MUSICALES: PAELLA DE CALABAZA

Hoy:

Paella de pollo, calabaza y setas

Artistas Invitados: Iron Maiden (The number of the beast)

 
     Como buenos valencianos que somos en Sibarismusic no podíamos resistirnos más tiempo a publicar una receta arrocera.Por ello hemos optado por una paella de pollo, calabaza y setas, un arroz seco delicioso, pero que no hay que confundir con nuestra famosisísima paella de la huerta valenciana cuya ultra-secreta receta, que sólo pasa de padres a hijos, guardamos en una caja de seguridad de un Banco Suizo. Un plato donde el ingrediente principal, además de la base de arroz y el acompañamiento de pollo y setas, es la ríquisima y nutritiva calabaza que da un toque dulzón y muy sabroso al plato. Y para tan célebre ocasión, para acompañar la elaboración de un plato tan heavy como una paella, nos hemos acompañado de uno de los clásicos del  heavy metal ochentero, los Iron Maiden. 

     Hemos elegido su tercer álbum de estudio, grabado en 1982, "The number of the beast", el primero que contó como vocalista con Bruce Dikinson y último en que la banda que tuvo como percusionista al recientemente fallecido Clive Burr, que sería sustituido por Nicko McBrain. El disco supuso el primer gran éxito para la banda británica, llegando a la cabeza de las listas inglesas y norteamericanas. Y también la primera gran polémica ya que algunos sectores moralistas acusaron a los Maiden de satánicos debido a las alusiones al maligno que  hacían el título y la portada del disco así como los contenidos de algunas canciones. Además corrió la noticia de que, durante la grabación del disco en los estudios Battery, sucedieron extraños hechos dignos de un debate en Cuarto Milenio, que se atribuyeron a alguna diablura propiamente dicha. A pesar de esto y de que la gira de los Maiden consiguiente al lanzamiento del disco, "The Beast on the road", intentó ser boicoteada, el disco llegó a número 1 en las listas británicas y a disco de platino en los Estados Unidos. 

Ingredientes (para 2 personas):

Caldo de pollo y verduras.
Arroz "bomba".
Carne de pollo (a poder ser deshuesada).
Calabaza.
Setas.
1 tomate rallado o triturado.
Aceite de oliva.
1 hebra de azafrán.
Pimentón.
Pimienta negra molida.
Sal.

Elaboración:

     Estamos ya listos para "darle" al Play y que comience a sonar "Invaders", el primer tema del disco, transmitiéndonos toda la estimulante potencia de los Maiden mientras nos cuentan como los vikingos siembran el pánico y nos inspira en nuestra ardua, pero muy provechosa, tarea arrocera...

     En primer lugar hay que elaborar un caldo de pollo y verduras antes de empezar a hacer el arroz, para ello podemos usar parte del pollo y verduras como judías, zanahoria, cardo, apio, también unas patatas, sal y alguna especia si nos gusta. No pasa nada si hacemos mucho, porque usaremos una parte del caldo y el resto del cocido resultante lo podremos reutilizar para otro día (Foto 1).
    A continuación prepararemos la calabaza, cortando la cantidad que estimemos necesario (según los comensales y nuestro gusto, recordemos que la calabaza le dará un sabor dulzón) en forma de dados (Fotos 2 y 3). Rallaremos un tomate y deshuesaremos la pechuga de pollo (Foto 4). 


     

Foto 1

Foto 3

Foto 2

Foto 4

    

      Mientras tanto, los hijos de los malditos, "Children of the dammned", habrán llegarán a nuestros altavoces y mientras todo arde a su alrededor nosotros seremos precavidos e iremos preparando el resto de ingredientes para que cuando empecemos a elaborar la paella propiamente dicha nada nos "pille por sorpresa". Prepararemos el arroz, que ha de ser arroz "bomba" (como se ve en la Foto 5. Nosotros para cada 2 personas añadimos una tacita de café más un "puñadito". También cortaremos y lavaremos, sin exceso de agua, las setas y después las escurriremos bien (Foto 6).

Foto 5

Foto 6

    



         El disco seguirá sonando, reivindicando la libertad del recluido con "The Prisioner" y, mientras escuchamos a la doncella de hierro, seguiremos con nuestra otra doncella metálica.... 
     Antes de empezar a cocinar habrá que asegurarse de que el recipiente, la "paella", quede bien nivelado sobre la superficie de cocción. Para ello pondremos el aceite y observaremos que quede bien repartido por la superficie de la paella, sin puntos de desequilibrio para que después cueza todo el contenido uniformemente y el arroz quede en su punto. Lo ideal sería poder hacer la paella a leña porque se nota en el sabor final, pero si la elaboramos bien también quedará muy rica si la hacemos a fuego "de gas", vitrocerámica, etcétera.

     Una vez nivelada calentaremos el aceite y cuando ya este muy caliente añadiremos la carne de pollo  (la carne, preferiblemente pechuga, la habremos salado ligeramente, deshuesado y fraccionado previamente en pedazos pequeños. Foto 7) y la sofreiremos hasta que quede bien "doradita", sin llegar a chamuscarse (Foto 8). 

Foto 7

Foto 8

  Una vez la carne esté "doradita" retiraremos el pollo y lo dejaremos en un plato en papel de cocina para que absorba el aceite sobrante. Cuando pierda un poco el calor lo cortaremos a pequeños trocitos y lo dejaremos listo para volver a añadirlo junto a los demás ingredientes justo antes de empezar la cocción (Foto 9). 

     

  

Foto 9

     Mientras los Maiden nos cantan sobre la sórdida vida de Charlotte en el "22 Acacia Avenue", nosotros, muy aplicados habremos ido sofriendo la calabaza y cuando se haya a puesto blandita será el momento de añadir las setas y después el tomate, que habremos rallado retirando las pepitas. Dejaremos que se sofría todo volviendo a salar ligeramente. Cuando el sofrito esté casi en su punto incorporamos el pimentón y lo mezclamos con el resto de ingredientes sin dejar que se queme. (Fotos 10, 11, 12, 13). 

Foto 10

Foto 11

Foto 12

Foto 13

      Acto seguido añadiremos el caldo hasta la altura aproximada de los remaches de las asas de la paella. Hay que tener en cuenta la capacidad del recipiente en proporción a la cantidad de arroz, podemos hacer por ejemplo una paella para dos en un recipiente con capacidad para 4 raciones y habrá que tenerlo en cuenta. Esto requiere práctica y paciencia, para empezar recomendamos hacer paella para pocos comensales que es más sencillo e ir "atreviéndonos" con paellas más grandes poco a poco conforme la vayamos pillando el "truquillo". Dejaremos que los ingredientes se cuezan aproximadamente entre 30/35 minutos (Foto 14). 
     
     Mientras esperámos pacientemente a que todo se cueza los Iron Maiden cantarán a coro "six, six, six, The number of the beast", el primer sencillo extraído de álbum, anunciándonos que la "bestia" anda suelta. Nosotros, por si acaso, subiremos el fuego al máximo para que la bestia no haga de las suyas.

Foto 14

     Posteriormente añadiremos nuevamente caldo caliente para reponer el que se ha evaporado  durante la cocción de la carne y verduras, esperando después unos 3 o 4 minutos para que el caldo añadido se mezcle bien con el resto. Acto seguido añadiremos el azafrán, probaremos el caldo y rectificaremos de sal, si es necesario, para después dejar que el agua siga en ebullición a fuego fuerte 5 minutos mas.  A continuación añadiremos el arroz, que tradicionalmente se introduce en el recipiente formando dos "caballones en cruz " (¿sería originariamente para espantar a los malos espíritus? no lo sabemos, pero en este contexto la idea queda muy bien (Foto 15) para después repartir homogéneamente con una paleta por toda la paella. La cocción durará entre 18 y 20 minutos dejándose unos 10 minutos a fuego fuerte y a continuación entre 8 y 10 minutos a menos fuego sin tocar para nada el contenido en ebullición. Aunque veamos que se forma una capa grasa en la parte superior del caldo no hay que romperla ni tocarla, esta mejorará el sabor final 

      

Foto 15

     

      Finalmente, cuando veamos que el arroz está en su punto, al dente , sin explotar, y ha absorbido todo el caldo, la paella se retira del fuego y se dejará reposar unos 5 minutos (Fotos 16 y 17) tapándola por ejemplo con papel vegetal de horno para mantener el calor y que los ingredientes acaben de absorber toda la sustancia del caldo. Lo ideal, si hacemos la paella en el campo, es dejarla reposar en suelo de tierra a la manera "tradicional".

Foto 16

     

Foto 17

     Mientras terminamos nuestra paella y esperamos a que repose los Maiden nos deleitarán cantando sobre las injustas guerra indias norteamericanas ("Run to te Hills", segundo sencillo extraído del disco), el código del hampa ("Gangland") y los turbios y desesperados pensamientos de un condenado a muerte en la horca en "Hallowed be thy name". Pero, por suerte, nuestra desesperación acabará pronto porque ya estaremos sentados a la mesa y listos para degustar nuestra paella de pollo y calabaza con setas... Bon Profit!!

Miscelánea:

     Cuenta la leyenda que, hace muchos, muchísimos años, un irlandés llamado Jack, tacaño, borrachín, estafador, mentiroso y muy, pero que muy malo, estaba una noche bebiendo en una taberna, con la mala suerte de que se encontraba allí el mismísimo Belcebú. Tal era la osadía de Jack que decidió engañar al Diablo y, al haberse quedado sin dinero, le propuso venderle su alma a cambio de una última bebida. El Diablo, ávido de la malvada alma del irlandés, aceptó el pacto y se transformó en moneda para pagar la última bebida de Jack al tabernero. Jack rápidamente cogió la diabólica moneda y la introdujo en su monedero, el cual contenía un crucifijo, de manera que el maligno quedó atrapado en su interior. Para liberarlo, Jack hizo prometer a Satán que no vendría a por su alma en 10 años.


     Al cabo de 10 años Satán se reunió de nuevo con Jack para reclamar su alma, esta vez en el campo. Cuando el Diablo se disponía a cobrarse la deuda del irlandés este pidió un último deseo, comer una manzana de un árbol cercano. El Diablo, ansioso y a sabiendas de que no podía negar un último deseo a un condenado, se encaramó de un salto al árbol para coger la manzana, mientras el astuto Jack, rápidamente, talló un crucifijo en el tronco del árbol de manera que el Diablo quedó de nuevo atrapado. Esta vez para liberarlo Jack hizo prometer a Lucifer que jamás se cobraría su alma, el maligno tuvo que aceptar...

   
     Unos años después le llegó su hora a Jack y, claro, su malvada condición hizo que las puertas del cielo estuvieran cerradas para él. Pero cual fue la sorpresa de Jack al descubrir que las puertas del infierno también estaban definitivamente cerradas para él, dada la promesa que le había hecho el Diablo de no tomar jamás su alma. De esta manera Jack quedó condenado a vagar eternamente como un fantasma en la oscuridad. Pero la caradura de Jack, que era infinita, le hizo atreverse a pedir un último deseo a Satán, algo que le sirviera para alumbrarse en la oscuridad por la cual su alma había sido condenada a vagar eternamente. El Diablo, en un acto de satánica compasión, le proporcionó un carbón que Jack aprovechó para alumbrarse, improvisando un fanalillo, tras ahuecar un nabo que llevaba en el bolsillo, e introduciendo en su interior el carbón que le había dado el Diablo.

    Esta es una vieja tradición de los celtas, los cuales depositaban nabos ahuecados y carbón en las tumbas de sus difuntos, para alumbrarles su camino de regreso al mundo de los vivos y protegerlos de los malos espíritus. A su vez, esta tradición procedía de un culto pagano celta denominado Samhain. Los emigrantes irlandeses a los Estados Unidos de América se llevaron con ellos esta tradición, pero al llegar a la tierra de las oportunidades se encontraron la Curcubita, o Calabaza, y se dieron cuenta de que era mucho más práctica que los nabos para hacer los fanales que alumbrarían a las almas perdidas en la oscuridad . Y así, gracias a la luz de la calabaza, la bestia muy probablemente perderá muchas almas en las que estampar su 666...

    
   


                                                                                                         Musical Gourmet

Fuentes:

Rafael Marmol, Los mejores arroces del mundo, L´Eliana, Carena Editors, 2007. 

http://www.cultivemacasa.com/info/60/la-leyenda-de-jack-olantern-la-calabaza-del-diablo
http://www.halloween.com.es/historia-costumbres-de-halloween/calabazas.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Iron_Maiden(caragol)
http://es.wikipedia.org/wiki/Paella
http://es.wikipedia.org/wiki/The_Number_of_the_Beast

Imágenes:

Wikimedia Commons
http://elcomercio.pe/gastronomia/1326454/noticia-que-calabazas-son-simbolo-halloween